jueves, 5 de octubre de 2017

SANTA CRUZ EN LA BATALLA DE BOQUERON


Por Horacio Aguirre Villanueva
Al inicio de la Guerra del Chaco entre 1932 y 1935 que enfrento a Bolivia y Paraguay; los primeros días de septiembre de 1932 se produjo la “Batalla de Boquerón”, que en síntesis es el sitio de tropas del ejército Paraguayo a 619 combatientes bolivianos dirigidos por el Tcnl. Manuel Marzana, que durante 23 días de cruentos combates privo a los cercados de todo refuerzo y aprovisionamiento del exterior. El 29 de septiembre día de la caída del fortín, los paraguayos comprobaron con tristeza, que los sitiados eran un número inferior del que ellos pensaban y encontraron a los mismos en lamentables condiciones, con muertos sin sepultar y heridos agonizando al filo de la muerte. En esta acción de armas el ejército boliviano escribió la página más importante de su historia.
Este 29 de septiembre de 2017 se cumplen 85 años de la Batalla de Boquerón; existen memorias escritas por Héroes de Boquerón que son las siguientes: “La Gran Batalla” de Manuel Marzana, “Boquerón” de Alberto Taborga, “Boquerón” de Antonio Arzabe y “Memorias de un Soldado” de Alberto Saavedra; también hay los diarios de campaña de Luis Cuenca, José Velasco y Teófilo Caro, escritos que no han sido publicados de manera oficial, además tuve conocimiento de la existencia de los diarios de Miguel Ocampo que pronto será publicado, de Julio Romero y de Renato Sainz este último difundió sus escritos por fascículos en el periódico “Presencia” de La Paz en la década de los 60.
Un investigación que vale la pena leer es la tesis de Edson Flores titulado: “Los Combatientes Bolivianos en el Cerco y Batalla de Boquerón Efectos Psicosomáticos”, en la cual se hace un análisis del porqué de la persistencia, resistencia y valor demostrado por los combatientes bolivianos ante la adversidad y las duras condiciones que les tocó enfrentar, de la cual se tiene dos respuestas, una es la esperanza de que sus compatriotas pudiesen romper el cerco y salvarlos, la otra es el carácter simbólico que tenía el fortín el que consideraban como espacio vital para los intereses del país, ya que el mismo había sido construido con la participación del todo el destacamento Marzana, trabajando días enteros, talando árboles, construyendo trincheras, nidos, pozos de agua, abriendo picadas, sendas; entre las frases que utilizaban ellos está la siguiente: “nadie, ningún poder humano nos sacara de estos reductos que hemos construido con pasión, sudor y tesón, no pasaran”.
Finalmente hago mención de los Héroes de Boquerón del departamento de Santa Cruz, para que sus nombres no queden en el olvido, Rene Miranda, Rogelio Banegas, Ruperto Marañón, Jesús Silva, Peregrino Morón, Hermogenes Soto, Luis Zapata, Víctor Mollercoma y otros que no los mencionamos por carecer de una lista completa, honor y gloria ¡Viva Bolivia!.


sábado, 26 de marzo de 2016

SOBRE LA BANDERA DEL FORTÍN BOQUERÓN



En mi visita a la ciudad de La Paz en el mes de enero de 2016, promocionando la revista Boquerón y haciendo investigación para sacar una publicación de la batalla, gracias a la amistad que hice con Rosa Elena y Omar Víctor Carrión Aguirre profesores de ciencias sociales y pedagogos, me dijeron como ubicar a una persona importante descendiente de un héroe de Boquerón, por lo que tuve la suerte de conocer al hijo único todavía vivo del General Clemente Inofuentes, el señor Jorge Inofuentes de 75 años de edad, una persona bastante conocida dentro del circulo de familias paceñas, el cual tuvo una entrevista conmigo de dos horas, donde me confeso de manera inédita cual es la verdadera historia de la BANDERA DE BOQUERÓN: puedo presumir que en Boquerón existían entre 5 a 3 banderas además de las banderas de las compañías, tenían un objetivo dentro de las operaciones de la batalla era ponerlas en lugares aislados para simular que el fortín abarcaba más espacio y poder engañar al enemigo como también ponerlas en un lugar para simular que allí estaban bolivianos y la artillería enemiga lance fuego a ese sector donde no existía nadie, ósea que las banderas se usaban de manera inteligente, unos días se las flameaba para que tropas bolivianas se ubiquen dónde está el fortín y otras veces se las escondía, ellas eran pequeñas de 80 cm. Por 50 cm. aproximadamente, pero la principal bandera era la del regimiento campos que era el grueso del destacamento Marzana y esa bandera supuestamente por órdenes de Marzana debía ser enterrada en el fortín, Clemente Inofuentes natural de Yungas escondio la bandera en su bota, luego ordeno a un soldado paisano de apellido Castillo de oficio sastre, realizar en su blusa de combate o guerrera un doble fondo en esa prenda, protegido por una tela para esconder la bandera, además le dio órdenes expresas de no hablar a nadie lo realizado, así que Inofuentes escondió la bandera de esta manera hasta llegar a Bolivia, donde le entrego al general Davila Infante quien posteriormente se la entrego al presidente Jaime Paz quien se la dio al Estado Mayor.
La ubicación real de la bandera se encuentra en el salon de banderas del gran cuartel de Miraflores en la ciudad de la Paz, está en una bandeja de vidrio contra incendios, el año 1991 cuando el salon de banderas del gran cuartel de Miraflores sufrió un incendio, esta banderita fue uno de los pocos objetos que se salvaron, la misma tiene una peculiaridad que la distingue, la misma tiene sangre que pertenecía al Subteniente Inofuentes de una herida que sufrió en la batalla. 
Próximamente escribiré un artículo con más detalle de este tema

sábado, 5 de marzo de 2016

DVDs DE LA GUERRA DEL CHACO Y DEL PACIFICO

LOS EXTRAORDINARIOS DVSs DE LA GUERRA DEL CHACO Y DEL PACIFICO MATERIAL QUE CONTIENE FOTOS, VÍDEOS Y DOCUMENTOS DE ESTOS IMPORTANTES SUCESOS, PEDIDOS EN TODO EL PAÍS AL CEL. WHATSAPP 75305143. PRECIO 35 BS.